Emilia Aranda reflexionó sobre el matrimonio y el rol de la mujer dentro de este. La influencer conversó con Epa! sobre la repercusión que generó su reflexión entre sus seguidores.
Emilia Aranda arrancó la semana de una manera bastante romántica, su esposo, Ronaldo, tenía una larga jornada laboral a lo que ella reveló que decidió mimarlo preparándole todas sus comidas, desde el almuerzo hasta la merienda, lo hizo con un fuerte mensaje, “hacer esto por él no me quita poder”.
Nos pusimos en contacto con Emilia y ella siguió reflexionando sobre el matrimonio, lamentó que a veces confundan algunos gestos con un acto de “sumisión”, dijo que cuándo decide cocinarle a su esposo lo hace con amor y no por obligación.

“Ese fue un día especial en el que quise tener ese gesto y me salió del corazón pero obviamente no soy una máquina, ni me creo una “supermujer” tampoco, hay días donde simplemente no doy más o los dos tenemos una agenda apretada y no se puede, la clave está en que nos entendemos, nos respetamos y aprendimos a cuidarnos también desde la empatía como en ese día que yo sabia que le esperaba un día pesado, no se trata de exigencia, sino de equilibrio también”.
“Grabé porque quería mostrar un gesto real, cotidiano, de esos que a veces pasan desapercibidos. No fue solo para mostrar una lonchera, sino para visibilizar que cuidar también es una forma de amar, y que esos pequeños actos tienen mucho valor, aunque hoy en día no siempre se ve así“, dijo Emilia en comunicación con este portal.

Emilia confiesa que fue todo un desafío familiarizarse con las tareas del hogar ya que nunca dejó de lado su faceta profesional, “sinceramente, muchas cosas aprendí ya estando casada, ser esposa es un aprendizaje constante. Lo que antes hacía desde la rutina, hoy hago desde la intención. Entendí también que cuando hacés las cosas con amor, hasta lo más básico se vuelve especial”.
En el día a día, Ronaldo también tiene algunos gestos que hacen que Emilia se siente querida, “sí, un montón luego , a su manera, él también me cuida, me escucha, me sostiene, me hace sentir amada en los detalles, no solo con palabras, creo que los gestos no tienen que ser iguales, pero sí mutuos. Un amor sano se da, se recibe y se construye entre los dos“, contó Emilia a Epa!.

Si bien le encantan las fechas especiales y los regalos de amor, Emilia resaltó que lo que realmente sostiene a un matrimonio son los pequeños detalles, “los grandes momentos son hermosos, pero el matrimonio se sostiene en lo pequeño, esto me di cuenta en estos 11 años de estar juntos ejemplo en una lonchera, en un café servido, en preguntar ¿cómo estás? con ganas reales de escuchar su respuesta. Son esos gestos cotidianos que nos recuerdan: “te elijo hoy, otra vez, como el primer día”, finalizó.
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